En esta entrada queremos mostrar cómo se ha podido mejorar la calidad de vida de una persona, A PROPÓSITO DE UN CASO.

La evidencia científica cada vez apoya más los beneficios de la rehabilitación multidisciplinar en personas con daño neurológico (1-4), tanto niños como adultos.

En un porcentaje muy elevado de personas que han sufrido daño cerebral su calidad de vida está disminuida (5). Pero no sólo sucede esto en el paciente, también para sus cuidadores (6,7). Por ello es esencial realizar una rehabilitación multidisciplinar lo antes posible.

REHABILITACIÓN ADAPTADA

La rehabilitación debe basarse en las necesidades de la persona. En el caso que vamos a describir su principal demanda fue el aumento de la participación de su extremidad superior derecha (MSD) en el desempeño de las actividades de la vida diaria.

 Para comenzar primero realizamos una valoración del déficit, actividad y participación.

 Las escalas utilizadas fueron:

• En la valoración de la sensibilidad del MSD. Prueba de monofilamentos de Semmes-Wesitein.

• Valoramos el déficit y la gravedad de las secuelas motoras mediante el Fugl- Meyer.

• La destreza manual gruesa con el BBT (Box and Block).

• Para valorar la destreza de los dedos NHPT (Nine Hole Peg Test).

• La valoración de la fuerza de la mano se midió con un Dinamómetro.

• Con MAL (Motor Activity Log), valoramos la participación del miembro superior derecho en las actividades del día a día. Esta escala valora tanto la cantidad de uso como la calidad de uso.

• Y finalmente con Abilhand medimos la percepción que tiene el paciente sobre las dificultades manuales del día a día.

Tras esta exploración planteamos objetivos de tratamiento específicos, medibles y temporales. La intervención fue realizada por el equipo de terapia ocupacional y fisioterapia de CIRON, con técnicas específicas para el paciente neurológico. Los resultados finales obtenidos fueron los que se describen a continuación.

En la escala Fugl-Meyer podemos ver en este cuadro la mejoría tanto en extremidad superior, muñeca, mano y coordinación-velocidad.

En la escala MAL (Motor Activity Log), que medíamos la participación del miembro superior en sus actividades diarias, vemos como hay mejoría tanto en cantidad como en calidad.

Y en la escala Abilhand, medimos la percepción de la persona sobre sus dificultades manuales. La puntuación máxima que obtener es de 168. En esta exploración también existe un aumento de la puntuación.

En resumen, la paciente obtuvo una mejoría en todas las pruebas utilizadas, mejorando su participación del MSD en sus actividades de la vida diaria, y por tanto su calidad de vida.

El uso de una correcta exploración permite observar de un modo objetivo las dificultades, aplicando las técnicas necesarias, favoreciendo un mejor tratamiento rehabilitador MEJORANDO LA CALIDAD DE VIDA DE LAS PERSONAS.

Cuesta Ruiz, F. Terapeuta Ocupacional.

BIBILIOGRAFÍA 

1.    Martín-Monzón I. Advances and challenges in neurorehabilitation for acquired brain damage (Avances y desafíos en neurorrehabilitación del daño cerebral adquirido). Studies in Psychology. 2022; 43(1): 1-7.

2.    Rubio PM, Atarés NG. Secuelas del daño cerebral adquirido, estudio sobre las necesidades terapéuticas. Revista de logopedia, foniatría y audiología. 2019; 39(2): 52-58.

3.    Castellanos-Pinedo F, Cid-Gala M, Duque P, Ramírez-Moreno JM, Zurdo-Hernández JM. Daño cerebral sobrevenido: propuesta de definición, criterios diagnósticos y clasificación. Rev Neurol. 2012; 54(6): 357-366.

4.    Rios-Lago M, Muñoz-Céspedes JM, Paúl-Lapedriza N. Alteraciones de la atención tras daño cerebral traumático: evaluación y rehabilitación. Rev Neurol. 2007; 44(5): 291-7.

5.    Fraga MJD, Cabeza IC. Calidad de vida y daño cerebral adquirido. Revista electrónica de terapia ocupacional Galicia, TOG. 2011; (14): 7.

6.    Gabriel P, Martín JMB. Depresión, ansiedad y estrés: Evaluación de la calidad de vida en cuidadores de pacientes con daño cerebral adquirido. Avances en salud mental relacional. 2003; 2: 7.

7.    Domínguez Mejías S, López-Espuel, F. Calidad de vida y sobrecarga del cuidador de personas con Daño Cerebral Adquirido. Una revisión sistemática. Archives of Nursing Research. 2007; 1(2): 99.